Perales del Puerto. Paraísos ocultos. Rafa, palabras en piedra y papel.
¿Has oído el rumor de la
hoja en su apagado
descenso hacia la tierra?
así quisiera soñar en mi
última palabra»
Quedamos una tarde de esta semana, nos hemos visto varias veces antes, en algún encuentro literario, cursos de escritura, veladas poéticas, siempre en actos relacionados con las palabras.
Conozco el trabajo que realiza con la revista del pueblo, he visto algún número y me parece maravillosa, me alegre por el premio que les concedieron y hoy contemplo su rostro sereno, con ojos tan vivos como inquietos, palabras templadas y siempre en busca de la perfecta que transmita todo lo que siente, como en sus poemas.
Al principio me dice que no sabe que me puede interesar de su paraíso oculto, y yo solo pienso ¿qué no?
Entrar en su jardín en entrar en un paraíso oculto, plagado de palabras impresas en pizarras, piedras, llenas de ironía, sabiduría…delicadeza.
Entrar en su jardín es entrar en su corazón.
¿Cuánto tiempo llevas viviendo en Perales?
Ya hace 25 años. Nací en Bilbao y como mi padre era funcionario, recorrimos media España. Cuando conocí a Elena, mi mujer, viajamos de voluntarios a Ecuador. Cuando regresamos a España, saqué mi plaza como maestro en Sierra de Gata, y al ser mi hijo pequeño decidimos que el mejor sitio para quedarnos sería Perales del Puerto. Hoy en día puedo decir que es el lugar que considero mío. En el único que yo he decidido quedarme.
«Perales del Puerto es el lugar que considero mío»
¿Cual es tu lugar favorito para caminar en el pueblo?
Por la orilla del río y la dehesa de arriba al atardecer.
¿Cuándo descubriste la escritura y que consigues a través de ella?
La descubrí muy pronto, porque mi padre ya cuando era pequeño me decía «haz versos, pero no hodas».
Lo que intento es sacar hacia fuera lo que llevo dentro y compartirlo.
¿Siempre escribes en el mismo sitio?
Soy muy anárquico y muy vago a la hora de escribir. No soy nada maniático. A veces se me ocurre una idea y tardo mucho en desarrollarla.
¿Qué te sirve de inspiración?
Cualquier cosa, desde un comentario de un crío en el cole, una noticia de la televisión….yo creo que si tenemos los ojos abiertos cualquier cosa puede valer.
Me gustaría que habláramos también de la revista que creaste en el colegio del pueblo, primero llamada Peralina y luego Peraluna, a la que se que estás muy entregado e inviertes mucha parte de tu tiempo. ¿Cómo se te ocurrió la idea de que naciera?
Cuándo estuvimos en Ecuador ya trabajamos con una revista y creo que es un instrumento muy potente para interactuar con los alumnos, para transmitir valores, saber lo que piensan sobre las cosas que pasan en el mundo, motivarles para crear dibujos y poemas que luego comparten. Cómo nosotros hacemos todo el proceso de la revista también la manera en la que la elaboramos les viene bien para trabajar su creatividad, es totalmente artesanal.
Otra de la partes que me gusta de la revista es que las madres también colaboran en ella, y la gente del pueblo se involucra, con testimonios, entrevistas…en realidad creo que la revista a acabado siendo la crónica de Perales del Puerto desde hace 25 años.
«No concibo la escuela sin revista escolar»
Cuando propuse crearla me dijeron que sin ningún problema, para adelante, y junto con la colaboración de algunas madres, mis compañeros y por supuesto de los niños del colegio, comenzamos la revista primero llamada Peralina. El tema de folios y material para editarla sale del colegio, y como ya te comente antes el proceso es totalmente artesanal, repartimos una a cada familia, y lugares de reunión del pueblo para que la pueda ver todo el mundo.
Hace unos años ganamos el segundo premio nacional de revistas escolares, pero ya con la revista como Peraluna.
A lo largo de la conversación me estas hablando de la misma revista con dos nombres diferente, Peralina y Peraluna y no se porque este cambio de nombre después de 27 números llamándose Peralina, ¿me puedes explicar el por qué?
Bueno, hacia el último número de Peralina surgieron problemas porque a algunas personas no les parecía que se estaba desarrollando bien mi trabajo y decidí dejarla, estuve durante 6 o 7 años sin editar ninguna publicación hasta que decidí que ya era hora de empezar de nuevo. Durante ese periodo es cuando comencé a crear mis poemas y textos en piedra y pizarra. Cuándo regresé con la revista, fue cuando nos presentamos al concurso y la verdad es que ganar el segundo premio me reafirmo en todo el trabajo, esfuerzo y empeño que había puesto tanto antes, como en este momento, porque aunque tengas nombre diferentes son la misma revista, las dos ganadoras del mismo premio.
Tienes algún proyecto para un futuro que puedas compartir con nosotros.
El año que viene me jubilo, voy a tener mucho tiempo que quiero invertir en viajar, organizar mis escritos y…..no descarto la idea de volver a repetir mi experiencia como voluntario.
Queremos organizar una exposición con los 27 números de Peralina y 21 de Peraluna.
Rafa, muchísimas gracias por pasar esta tarde conmigo, encantada de charlar, caminar por tu paraíso particular y dejarme que conozca mas de cerca tu trabajo.
Esta entrevista no se termina aquí porque tenemos una cita pendiente, pero esta vez en el cole.
«Ya no sueña,
ya no viaja
no galopa por las ramas
de la infancia
ayer perdida.»
«La tierra es un des-astro
dijo desolado el sol»
«Agua
que sueña ser
voz
para tu nombre»
«Verdugos,
víctimas
complices
no hay mas razas»
«Un buen hombre
hace años
me aconsejó
hijo, haz versos pero no (h)odas
a veces he pecado contra el 4º mandamiento.»
Todos los poemas que aparecen en esta entrada son de Rafa.
Rafa me llama por teléfono, tenemos una cita pendiente, la exposición con las portadas de las revistas que a hecho realidad guardar la historia de un pueblo durante tantos años, que ha marcado un antes y un después sobre la manera de educar, ver diferentes puntos de vista sobre la vida y a muchos contemplar con añoranza pequeñas partes de su reflejo impreso…abre sus puertas para que todos los vecinos puedan ir a verla.
Mientras le espero entra gente que mira con cariño cada fotografía, que sonríen entre recuerdos y retroceden en el tiempo contemplando a sus hijos tan pequeños.
Es una gran despiadada para Rafa, que con orgullo recuerda quien hizo cada dibujo, quien puedo cada frase y porque, quien salía en cada foto…quien coso cada ejemplar y se encargó de preparar las portada.
Llega la hora de un merecido descanso, de algún viaje dormido en la productiva rutina, de recopilar papeles llenos de sentimientos atrapados y alguna que otra ironía.
Estoy segura que sabrás junto a tu familia disfrutar de esos momentos, pero también estoy segura de que te gustaría dejar en buenas manos tu querida Peraluna.
